Pese a que Antoni Gaudí no llegó a firmar ninguna obra en la capital del Baix Camp, no cabe duda de que el genial arquitecto comenzó a forjar su particular estilo durante la infancia y juventud en Reus. Esta primera formación fue clave para erigirse años más tarde en una de las figuras más singulares de la arquitectura contemporánea.
Con el espíritu del genial Gaudí guiando tus pasos, te proponemos una ruta modernista por Reus para conocer la ciudad catalana que dio vida al artista, un recorrido por el fantástico patrimonio que hoy en día puedes disfrutar en ella.
Ruta por la Reus más modernista
Estos son los puntos que no pueden faltar en la ruta modernista de tu visita a Reus, sin duda alguna, uno de los mayores atractivos de la ciudad tarraconense.
Gaudí Centre de Reus
Arrancamos nuestra ruta modernista por Reus en la plaza Mercadal, epicentro de la capital del Baix Camp, para visitar el Centro Gaudí, un espacio de tres plantas consagrado a difundir la vida y obra del arquitecto catalán.
En la primera de ellas, harás una aproximación al modernismo imperante en la Europa de fines del siglo XIX para introducirte después en las singularidades tanto del modernismo catalán como del modernismo reusense.
La segunda planta se acerca más a la faceta innovadora de Gaudí, incluyendo las aportaciones tecnológicas más importantes del artista, además de una referencia a la Sagrada Familia de Barcelona, la obra definitiva de Gaudí.
Finalmente, la tercera planta es un espectáculo audiovisual multipantalla que incorpora maquetas de algunas de las obras más importantes de Gaudí.
Casa Navàs
Contemporáneo de Gaudí, Lluís Domènech i Montaner es otra figura fundamental del modernismo catalán. En la propia plaza Mercadal se encuentra una de sus obras más importantes, tal vez la expresión más significativa del modernismo de Reus.
La Casa Navàs se construyó en los primeros años del siglo XX y aún hoy embruja por su exuberancia decorativa y por el carácter integral del edificio: desde la trama ornamental de los balcones y los marcos las ventanas a la iluminación o el mobiliario, todo está diseñado para un formar un conjunto armónico. ¡Esto es arte total!
Carrer de Monterols y calle Llovera
Continúa tu ruta modernista por Reus partiendo de la plaza de Mercadal hacia el carrer de Monterols. En este tramo, te encontrarás con la Casa Laguna y la Casa Carpa, dos edificios de Pere Caselles i Tarrats, discípulo de Domènech i Montaner, el arquitecto más prolífico del modernismo reusense, sumando innumerables contribuciones a lo largo y ancho de la ciudad.
Pasando la plaza de Prim donde se ubica el teatro Fortuny, diseñado por Francesc Blanc, llegarás a la calle Llovera, una de las más modernistas de Reus. En la acera izquierda verás, primero, la Casa Bartolí, de José Lubietas. Y solo unos metros después, en la acera derecha, tres casas modernistas de Caselles: la Casa Querol, la Casa Tomàs Jordi y la Casa Punyed. Todas ellas emblemas de una burguesía reusense que vivió su gran esplendor a partir del siglo XVIII, gracias, en buena parte, a la actividad comercial e industrial.
Carrer de Sant Joan
El carrer de Sant Jordi es la otra calle en la que podrás disfrutar de las mejores expresiones del modernismo de Reus. Partiendo de nuevo de la plaza Mercadal, toma en esta ocasión el carrer de Jesús y no te pierdas en primera instancia la Casa Iglésias y, más adelante, la Casa Munne, con su espectacular mirador acristalado de esquina, ambas firmadas por Caselles. Sigue ahora hacia el norte por el Raval de Jesús y alcanzarás ya el carrer de San Joan, dejando a la derecha la mencionada plaza de Prim.
En los apenas 500 metros que separan Prim de la plaça del Nen de les Oques te deleitarás con seis edificios modernistas: Casa Segarra, Casa Tarrats y Casa Grau —todos ellas de Caselles—, el Dispensario Antituberculoso, de Joan Rubió i Bellver, la Casa Rull y la Casa Gasull, estas últimas, de Domènech i Montaner.
Institut Pere Mata
Una ruta modernista por Reus no estaría completa sin la otra gran obra maestra de Domènech i Montaner: el Institut Pere Mata. Ubicada al norte de la ciudad, fuera de su casco histórico, la excursión merece la pena. Se trata de un conjunto de pabellones entre los que destaca el denominado Pabellón de los Distinguidos, que alojó en origen a enfermos con alto poder adquisitivo. Vidrieras, mosaicos, lámparas de diseño, mobiliario... En definitiva, el modernismo en su máxima expresión.
A buen seguro que tras completar esta ruta modernista por la capital del Baix Camp habrás profundizado en un estilo único que encontró en el reusense Gaudí a su exponente más original. Te llevarás un recuerdo imborrable de una de las ciudades más modernistas de Cataluña.