Situada a orillas del río Deûle, Lille constituye una de las ciudades más bonitas e interesantes de Francia. Su centro histórico, sus famosos mercadillos navideños y la posibilidad de realizar excursiones a lugares tan emblemáticos como Dunquerque, Bruselas o Brujas son sólo algunos de los atractivos que ofrece.
Disfrutar de una semana de vacaciones en Lille es un plan ideal, puesto que podrás aprovechar el tiempo al máximo y conocer todo lo que esta ciudad francesa tiene para ofrecerte.
En el norte de Francia, a pocos kilómetros de Bélgica, se localiza Lille, uno de los destinos más recomendables del país. La belleza de esta ciudad, a orillas del río Deûle, además de sus museos, su agenda de ocio y su exquisita gastronomía, contribuyen a que sea un plan perfecto para disfrutar de nuestras vacaciones y escapadas.
Dunquerque (o Dunkerque en francés) es una de las localidades más fascinantes del norte de Francia, en buena parte, por su pasado. A orillas del Mar del Norte, en el Flandes marítimo, su entorno resulta excepcional, así como todo el patrimonio histórico que alberga.
Viajar para conocer los mercadillos navideños en Francia y en Bélgica es uno de esos planes que no defrauda a nadie. La conexión aérea con las Canarias a los destinos de los que te hablaremos es excelente, de manera que te recomendamos que no pierdas esta oportunidad en unas fechas tan especiales.
Al norte de Francia nos encontramos con esta ciudad joya, una de las ciudades mejor conectadas de Europa y punto estratégico para recorrer la zona y los países vecinos. Lille es un auténtico cruce de caminos entre París (a dos horas en coche), Brujas y Gante (45 minutos), Bruselas (una hora y media), Londres (en apenas 4 horas) y otras ciudades francesas y belgas. Además, la ciudad está muy bien conectada con Alemania y el resto de Holanda. Puedes viajar todos los martes desde Gran Canaria con Binter y desde cualquier isla canaria gracias a las conexiones gratuitas. Si te animas a viajar con nosotros, no dudes en echar un vistazo a esta guía para no perderte nada de nada.
Lille es, quizás, una de las grandes desconocidas de Francia para la mayoría de turistas. Sin embargo, te garantizamos que su encanto no te dejará indiferente. Todo el que va regresa enamorado de su magia. La localidad francesa está repleta de historia y actividades culturales así se refleja en sus edificios y callejuelas llenas de encanto. Además, cuenta con grandes museos en los que perderte y empaparte de su arte, cultura y sus costumbres.
Al norte de Francia, prácticamente situada en la frontera con la vecina Bélgica, encontramos la ciudad de Lille. Quizás por su propia ubicación, fronteriza y tan al norte del país galo, para muchos esta localidad es una gran desconocida. Pero que eso no te engañe porque en Lille hay mucho que hacer. Y no solo eso, si se planea un viaje familiar se multiplican las opciones que hacer en Lille con niños.
El invierno, a pesar del frio, es la estación perfecta para realizar una escapada. Las ciudades se visten de colores, mercados navideños y en algunos afortunados casos, de nieve. ¿Te animas a hacer un espada invernal en algunos de nuestros destinos europeos?
Bruselas es una de las mejores excursiones de un día que puedes hacer desde Lille. La capital belga se encuentra a menos de 100 kilómetros de Lille y las conexiones de transporte entre ambas ciudades son rápidas y sencillas. Aunque Bruselas es una ciudad como muchos atractivos, si organizas bien tu excursión de un día, podrás disfrutar de lo esencial de la capital de Bélgica. A continuación, te ofrecemos información práctica sobre qué ver en Bruselas en tu excursión de un día desde Lille además de algunos consejos para tu viaje.
La ciudad de Lille es fusión de culturas, es historia, es ambiente universitario y es aroma a mejillones y papas fritas (moules et frites), una de las tradiciones culinarias más típicas de esta localidad. Muy cerca de la frontera con Bélgica, Lille representa a la perfección las señas de identidad que definen al norte de Francia, con su característica arquitectura flamenca y esa atmósfera tan acogedora que transmite su afable población local y que tantas veces se ha representado en el cine del país vecino.