Si estás planeando un viaje a Tenerife, hay un lugar que no puede faltar en tu itinerario: el Paseo de los Guanches en Candelaria, un rincón lleno de historia, cultura y vistas impresionantes al Atlántico. Este emblemático paseo, ubicado en el corazón de la Villa Mariana de Candelaria, es mucho más que un simple recorrido; es una puerta al pasado de la isla, un homenaje a los guanches, los antiguos habitantes de Tenerife, y una experiencia que combina espiritualidad, arte y naturaleza. En este artículo, te contamos todo lo que necesitas saber para disfrutar al máximo de esta joya tinerfeña, ideal para incluir en tu próxima escapada con Binter.
Un Paseo con Historia: Los Menceyes Guanches
El Paseo de los Guanches, situado junto a la Plaza de la Patrona de Canarias y la majestuosa Basílica de Nuestra Señora de Candelaria, es famoso por sus nueve imponentes esculturas de bronce que representan a los menceyes, los reyes guanches que gobernaban Tenerife antes de la conquista castellana en 1496. Estas estatuas, obra del escultor tinerfeño José Abad y erigidas en 1993, capturan la esencia de los líderes de los nueve menceyatos que dividían la isla:
- Acaymo (Tacoronte)
- Adjona (Abona)
- Añaterve (Güímar)
- Beneharo (Anaga)
- Pelicar (Icod)
- Pelinor (Adeje)
- Romen (Daute)
- Tegueste (Tegueste)
- Bencomo (Taoro)
Cada escultura, de tamaño real y con detalles que reflejan la fuerza y dignidad de estos líderes, está colocada estratégicamente frente al mar, como si custodiaran la basílica y la Virgen de Candelaria, conocida cariñosamente como La Morenita, patrona de las Islas Canarias. Este conjunto escultórico no solo es un atractivo visual, sino también un símbolo de la identidad canaria, que fusiona la herencia guanche con la cultura actual.
La Basílica y la Cueva de Achbinico: Un Encuentro de Culturas
El paseo no estaría completo sin explorar los alrededores, donde la Basílica de Nuestra Señora de Candelaria se alza como un faro espiritual. Construida en 1959 y declarada Bien de Interés Cultural, esta basílica de estilo neocolonial alberga la imagen de la Virgen de Candelaria, cuya historia se remonta al siglo XV. Según la leyenda, dos pastores guanches encontraron la talla gótica de la Virgen en una cueva en 1392, nombrándola Chaxiraxi, su diosa protectora. Este hallazgo marcó el inicio de una simbiosis única entre la cultura guanche y la cristiana, que aún hoy se refleja en las festividades de la Virgen, celebradas el 2 de febrero y el 15 de agosto, cuando miles de peregrinos recorren el Camino Viejo de Candelaria.
A pocos pasos del paseo, siguiendo el Paseo de San Blas, encontrarás la Cueva de Achbinico, también conocida como Ermita de San Blas. Este lugar, donde los guanches veneraron por primera vez a la Virgen, es un sitio de gran valor histórico y espiritual. La cueva, adosada a una ermita sencilla, alberga una réplica en bronce de la Virgen y una pequeña talla de San Blas. El entorno, con el sonido de las olas rompiendo contra el malecón, invita a la reflexión y ofrece una vista espectacular del océano.
Un Recorrido por el Encanto de Candelaria
El Paseo de los Guanches es solo el comienzo de lo que Candelaria tiene para ofrecer. El municipio, ubicado a tan solo 17 kilómetros de Santa Cruz de Tenerife, combina la tranquilidad de un pueblo pesquero con una vibrante atmósfera cultural. Recorre la Calle Obispo Pérez Cáceres, conocida como Calle de La Arena, una vía peatonal llena de tiendas de artesanía, souvenirs y restaurantes donde degustar platos típicos como el puchero canario o pescado fresco. No te pierdas la Casa de las Miquelas, un centro alfarero que muestra la tradición guanche de elaborar cerámica a mano, una técnica transmitida de generación en generación.
Para los amantes de la naturaleza, el paseo marítimo conecta con la Playa de Punta Larga, una tranquila playa de arena negra ideal para relajarse. Aunque no es la más espectacular de Tenerife, su ambiente apacible y sus vistas al Atlántico la hacen perfecta para un paseo al atardecer. Si prefieres explorar más, el Camino Real de Candelaria, con cinco siglos de historia, ofrece una ruta senderista que combina paisajes costeros con la herencia cultural de la isla.
Consejos para Tu Visita a Candelaria
- Cómo llegar: Candelaria está a solo 20 minutos en coche desde Santa Cruz de Tenerife. Si viajas con Binter, puedes aterrizar en el Aeropuerto de Tenerife Norte y alquilar un coche para mayor comodidad. También hay guaguas (líneas 122 y 123) que conectan con el municipio.
- Mejor momento para visitar: Las fiestas de la Virgen, en febrero y agosto, son ideales para vivir la cultura local, aunque el paseo es encantador todo el año. Evita las horas de más calor en verano y opta por la mañana o el atardecer.
- Dónde comer: Prueba la gastronomía canaria, donde sirvan cócteles y platos tradicionales con vistas al mar.
- Planifica tu día: Dedica al menos medio día para explorar el paseo, la basílica, la cueva y el centro del pueblo. Si tienes tiempo, combina tu visita con una ruta de senderismo o una escapada a las cercanas playas de Las Caletillas.
Por Qué Visitar el Paseo de los Guanches
El Paseo de los Guanches es mucho más que un lugar para hacer fotos; es un viaje al alma de Tenerife. Aquí, la historia de los guanches se entrelaza con la devoción a la Virgen de Candelaria, creando un espacio donde pasado y presente conviven en armonía. Ya sea que busques cultura, espiritualidad o simplemente un paseo con vistas al mar, este rincón de Candelaria te cautivará.
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