Si buscas un viaje que combine historia, naturaleza, pueblos con encanto y playas de ensueño, esta ruta de una semana desde Badajoz hasta Cádiz es para ti. Extremadura y Andalucía se unen en un itinerario que te llevará por castillos medievales, sierras verdes, ciudades llenas de legado y, finalmente, la costa gaditana con su luz especial. Es un plan perfecto para desconectar, descubrir rincones poco masificados y saborear lo mejor del sur de España. Prepara la maleta y sigue con nosotros este recorrido día a día lleno de recomendaciones prácticas y sitios que no querrás perderte. ¿Arrancamos?


Día 1: Badajoz, la Puerta de Extremadura
Empezamos en Badajoz, una ciudad fronteriza con Portugal que a menudo pasa desapercibida, pero que tiene mucho que ofrecer. Por la mañana, visita la Alcazaba de Badajoz, una fortaleza árabe del siglo IX que domina el skyline de la ciudad. Sube a sus murallas para disfrutar de vistas al río Guadiana y explora el interior, donde encontrarás el Museo Arqueológico Provincial. La entrada es gratuita y el paseo te llevará unas dos horas.
Luego, baja al casco antiguo y pasea por la Plaza Alta, un rincón colorido con soportales que te transporta a otra época. Aquí puedes tomar un café o probar las migas extremeñas en algún bar cercano. Para el mediodía, acércate a la Catedral de San Juan Bautista, una mezcla de gótico y renacimiento con una torre que merece unas fotos. Si te gusta el arte, el retablo interior es una maravilla.
Por la tarde, cruza el Puente de Palmas, un icono de Badajoz con sus 32 arcos, y da un paseo por la ribera del Guadiana. Si te sobra tiempo, visita el Parque de Castelar, perfecto para relajarte antes de la cena. Termina el día con tapas en la calle San Juan o la zona de la Plaza de España; el jamón ibérico y el queso de la Serena son imprescindibles.

Día 2: De Badajoz a Mérida: La Roma Española
Salimos temprano rumbo a Mérida, a solo 45 minutos por la A-5. Esta ciudad es un museo al aire libre, conocida como la "Roma de España" por su legado romano.
Empieza por el Teatro Romano, una joya del siglo I a.C. que sigue en uso para festivales. Junto al Anfiteatro, forma un conjunto que te dejará boquiabierto; dedica unas dos horas y compra la entrada combinada (unos 15 euros) para ahorrar.
Sigue con el Templo de Diana, en pleno centro, y el Puente Romano, uno de los más largos de su época. Para comer, busca un restaurante en la Plaza de España y prueba el cochinillo asado o la caldereta de cordero, platos típicos extremeños que te darán energía. Por la tarde, visita el Museo Nacional de Arte Romano, con mosaicos y esculturas que te cuentan la historia de la antigua Emerita Augusta. Si te quedan ganas, el Acueducto de los Milagros, a las afueras, es perfecto para un paseo al atardecer.
Día 3: Zafra y la Sierra: El Encanto Rural
El tercer día nos lleva a Zafra, a una hora desde Mérida por la N-432. Este pueblo, conocido como la "Sevilla chica", enamora con su aire señorial. Explora la Plaza Grande y la Plaza Chica, unidas por un arco y rodeadas de casas blancas con balcones. La Alcazaba de Zafra, hoy Parador, es otra parada obligada; aunque no te alojes, puedes entrar al patio y tomar algo en su cafetería.
Para comer, prueba el jamón de bellota o el gazpacho extremeño en algún mesón local. Después, sube hacia la Sierra de Aracena, a unas 2 horas por la N-435, ya en Huelva. Haz una parada en Aracena, un pueblo blanco famoso por su Gruta de las Maravillas, una cueva subterránea con formaciones espectaculares (reserva visita, unos 10 euros). Pasea por sus calles y visita el Castillo de Aracena, con vistas a la sierra.
Día 4: Huelva y la Costa de la Luz: Primer Contacto con el Mar
Hoy llegamos a la costa, a Huelva, a una hora desde Aracena por la A-49. Comienza en el Muelle del Tinto, un embarcadero histórico con vistas al río Odiel, ideal para unas fotos. Luego, visita el Barrio Reina Victoria, un curioso barrio obrero de estilo inglés que te sorprenderá. Para un toque cultural, el Museo de Huelva tiene piezas del pasado tartésico y romano.
A mediodía, dirígete a Punta Umbría, a 20 minutos, para tu primera playa. Su arena fina y sus chiringuitos son perfectos para relajarte y comer coquinas o choco frito, especialidades locales. Por la tarde, explora la Marisma del Odiel, un paraje natural donde puedes ver flamencos y aves migratorias si llevas prismáticos. Si prefieres más playa, Playa de la Bota está cerca y es más tranquila.
Día 5: El Rocío y Doñana: Naturaleza y Tradición
El quinto día nos lleva a El Rocío, a una hora desde Huelva por la A-49 y A-483. Este pueblo parece sacado de un western, con calles de arena y casas bajas. La Ermita de la Virgen del Rocío es el corazón del lugar, un sitio de peregrinación con un ambiente único. Pasea por la aldea y, si puedes, alquila un caballo para sentirte como un local.
Luego, adéntrate en el Parque Nacional de Doñana, a pocos kilómetros. Reserva un tour en 4x4 (unos 30 euros) para explorar sus dunas, marismas y bosques. Ver linces, ciervos o aves como el águila imperial es un privilegio, así que lleva cámara. Para comer, prueba el arroz con pato en algún restaurante de El Rocío. Por la tarde, relájate en la Playa de Matalascañas, a 15 minutos, una extensión de arena dorada con la curiosa roca del "Hombre de Piedra".
Día 6: Cádiz Capital: La Tacita de Plata
Llegamos a Cádiz, a una hora desde Matalascañas por la A-48. Esta ciudad, una de las más antiguas de Europa, te recibe con su luz y su salero. Empieza por la Catedral de Cádiz, con su cúpula dorada y vistas desde la Torre Tavira (sube por 6 euros). A pocos pasos, el Teatro Romano te conecta con el pasado fenicio y romano de la ciudad.
Pasea por el Barrio del Pópulo, el más antiguo, y piérdete por sus calles estrechas llenas de vida. Para comer, busca un freidor en el Mercado Central y prueba el pescaíto frito o las tortillitas de camarones. Por la tarde, relájate en la Playa de la Caleta, un rincón icónico entre los castillos de San Sebastián y Santa Catalina. Al atardecer, camina por el Paseo del Campo del Sur para ver cómo el sol se hunde en el Atlántico.
Día 7: Costa Gaditana: Vejer, Conil y Zahara
El último día exploramos la costa de Cádiz. Comienza en Vejer de la Frontera, a 45 minutos por la A-48. Este pueblo blanco en lo alto de una colina es pura magia: calles empinadas, patios floridos y la Plaza de España con su fuente de azulejos. Visita el Castillo de Vejer y disfruta de las vistas.
Sigue a Conil de la Frontera, a 20 minutos, para playa y ambiente. La Playa de los Bateles es ideal para un baño, y los chiringuitos sirven atún rojo de almadraba, un manjar local junto con un buen vino. Por la tarde, ve a Zahara de los Atunes, a 30 minutos por la A-2233. Su Playa de Atlanterra es salvaje y perfecta para desconectar. Si te animas, sube al Faro de Camarinal cerca de Bolonia para un último atardecer inolvidable.
Si aún tienes tiempo, no te olvides visitar el Puerto de Santa María, Sanlúcar de Barrameda y las mejores rutas de Cádiz.
Imprescindibles: Bañador, cámara, sombrero y hambre para probarlo todo.
Esta ruta de Badajoz a Cádiz en una semana te lleva por lo mejor de Extremadura y Andalucía: desde el legado romano de Mérida hasta las playas vírgenes de Zahara, pasando por la sierra y la magia de Doñana. Es un viaje para todos los sentidos, lleno de contrastes y recuerdos. ¿Te apuntas a hacerlo?
Recuerda que en Binter puedes comprar tus billetes multitrayecto, comprando la ida pos un lado y la vuelta por otro. Es decir, podrás comprar la ida desde Canarias a Badajoz y la vuelta desde Jerez de la Frontera/Cádiz a cualquier isla de Canarias.